martes, 1 de noviembre de 2011

El 'rey de la soja' brasileño elige la Argentina para expandir su producción

.EL CRONISTA Buenos Aires
Blairo Maggi tiene 55 años y comanda un imperio agroindustrial
en Brasil
Uno de los mayores productores mundiales de soja, el empresario y senador nacional brasileño, Blairo Maggi, pone un pie en el negocio agrícola argentino donde comenzará a sembrar soja. El grupo agroindustrial que comanda el empresario, que desde este año opera en el país como exportador de soja y otros cultivos, entra de este modo en el negocio de la producción local. De hecho, Argentina el tercer país en importancia detrás de Estados Unidos y Brasil.

Maggi indicó en una entrevista al diario brasileño Valor Económico que los altos costos de la tierra en Brasil no justifican una expansión de sus plantaciones de la oleaginosa en ese país. “Siempre estamos listos para expandirnos, pero en este momento es difícil debido a que el precio de la tierra es muy alto (en Brasil)”, dijo Maggi, senador del Estado de Mato Grosso, quien agregó que “no es momento para expandirse” en el país vecino.
De hecho, el grupo Amaggi, una firma familiar que Blairo Maggi heredó junto con sus cuatro hermanos, planea plantar en Brasil unas 210.000 hectáreas este año, las mismas que en la temporada pasada.

Y si bien no descarta un futuro crecimiento si las condiciones mejoran, Maggi dijo que el atractivo para expandirse está en África, Colombia y también la Argentina, país donde acaba de comenzar la siembra de la oleaginosa la soja. En este sentido, Maggi confirmó que planea plantar soja en 7.000 hectáreas argentinas.
Mientras que grupos locales como Los Grobo, El Tejar o MSU se expandieron en el último año a Brasil, Maggi eligió transitar el camino inverso, a pesar de las políticas gubernamentales que afectaron a los productores agrícolas argentinos en años recientes.
Desde 2006, las exportaciones de trigo y de maíz están cupificadas en la Argentina y los productores locales se quejan de que, por eso, ambos granos están subvaluados en el país. Pese a esto, y a que, a diferencia de Brasil, las exportaciones de granos pagan retenciones en la Argentina que llegan a ser del 35% para la soja, Maggi piensa en positivo: dijo que exportar soja desde Argentina es más fácil que desde el cinturón de granos central de Brasil, Mato Grosso, al puerto de Santos.
Brasil está en medio de la siembra de un área récord de soja, una cosecha que será recogida a comienzos del próximo año. Se espera que el área cultivada crezca alrededor de 3%, a unas 25 millones de hectáreas.
Según fuentes consultadas por El Cronista, los productores brasileños están más interesados en invertir en Paraguay y Uruguay que en la Argentina. Por eso, el interés de Maggi se ve como algo puntual, y no como una tendencia.
Con ventas por más de u$s 3.000 millones anuales, el grupo brasileño se ubica entre las 100 empresas más grandes de Brasil y entre las 15 primeras exportadoras de ese país.
La firma es dueña de tres plantas de molienda de soja, tiene puerto propio y más de 100 barcazas para el comercio fluvial, mayormente, de granos.
A Maggi se lo compara con el empresario argentino Gustavo Grobocopatel, de la firma Los Grobo, que cultivó unas 260.000 hectáreas el año pasado en cuatro países: Brasil, Uruguay, Paraguay y Argentina.







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